Estoy seguro que esta historia tiene un profundo y paradójico significado, pero le encuentro más de uno.
Es una "isla de los famosos" de la televisión britanica ITV, rodada en Nueva Gales del Sur (Australia) En ella unos famosos pasan hambre, mucha hambre. Tanta hambre pasan que dos de ellos preguntan a la organización si pueden cazar y comer ratas. La organización dice que sí y dicho. cazado y comido; los dos famosos cazan, matan, cocinan y comen una rata que les sabe a gloria divina.
Hasta aquí todo va bien.
Aparece una organización de defensa de los animales. Real. La Real Sociedad para la Prevención de la Crueldad con los Animales (RSPCA) que dice que "La muerte de una rata es inaceptable. Lo malo es que sólo se hizo para mostrarlo ante las cámaras". No solo ha dicho eso; ha puesto una demanda y los dos gourmets tendrán que hablar ante la justicia a principios del año que viene.
Partiendo de la base de que hay famosos que por más fama o por vil metal se someten a humillaciones fuera del programa del famoso normal, incluyendo pasar más hambre que Carpanta y correr riesgos como que te pique un escorpión o romperte una pierna saltando desde unos troncos, el que esos famosos estén dispuestos por pura hambre a comerse una rata es un objetivo logro del programa. Ahora bien; la rata tenía unos protectores que dudan del hambre de los famosos y creen que fue un puro acto de exhibicionismo para epatar a la audiencia.
Es una "isla de los famosos" de la televisión britanica ITV, rodada en Nueva Gales del Sur (Australia) En ella unos famosos pasan hambre, mucha hambre. Tanta hambre pasan que dos de ellos preguntan a la organización si pueden cazar y comer ratas. La organización dice que sí y dicho. cazado y comido; los dos famosos cazan, matan, cocinan y comen una rata que les sabe a gloria divina.
Hasta aquí todo va bien.
Aparece una organización de defensa de los animales. Real. La Real Sociedad para la Prevención de la Crueldad con los Animales (RSPCA) que dice que "La muerte de una rata es inaceptable. Lo malo es que sólo se hizo para mostrarlo ante las cámaras". No solo ha dicho eso; ha puesto una demanda y los dos gourmets tendrán que hablar ante la justicia a principios del año que viene.
Partiendo de la base de que hay famosos que por más fama o por vil metal se someten a humillaciones fuera del programa del famoso normal, incluyendo pasar más hambre que Carpanta y correr riesgos como que te pique un escorpión o romperte una pierna saltando desde unos troncos, el que esos famosos estén dispuestos por pura hambre a comerse una rata es un objetivo logro del programa. Ahora bien; la rata tenía unos protectores que dudan del hambre de los famosos y creen que fue un puro acto de exhibicionismo para epatar a la audiencia.
¿como se podrá dilucidar el caso?
¿cual es la verdad? ¿los concursantes comieron la rata por hambre o por gula de fama?
¿será cosa de que el juez o los miembros del jurado se sometan al mismo régimen no alimenticio y despues ponerlos una rata gordita a tiro?
Como precaución, los cámaras que siguen a esta gente mientras se lesiona y busca comida, tendrían que ser seleccionados por tener un aspecto poco apetitoso. Porque no tienen una Real Sociedad Protectora que vele por sus huesos y la carne que los cubre.
¿será cosa de que el juez o los miembros del jurado se sometan al mismo régimen no alimenticio y despues ponerlos una rata gordita a tiro?
Como precaución, los cámaras que siguen a esta gente mientras se lesiona y busca comida, tendrían que ser seleccionados por tener un aspecto poco apetitoso. Porque no tienen una Real Sociedad Protectora que vele por sus huesos y la carne que los cubre.
http://www.publico.es/internacional/276197/comerse/rata/tele/salir/caro
2 comentarios:
Pues fíjate, aunque es conocida mi militancia animalista, no siempre apoyo a la RSCPA o a PETA, pero en este caso les suscribo en casi todo.
Hace años, mi compadre de la Facultad, que tenía filias militares, se entretenía haciendo "supervivencia", y en la noche de sábado al domingo mataba a machetezos a la gallina que le habían dado por la mañana y se la comía, si lograba cocinarla. "Es supervivencia", me decía. "Ni de coña, es pasatiempo", le contestaba yo. Y así años.
Y sigo creyendo que era pasatiempo. En este caso también lo es: no deben sobrevivir, deben ganar un concurso.
La única pega que le pongo a la demanda es por qué ahora, con la rata, y no durante el resto del concurso o en las ediciones previas, con pájaros o pescados. Pero conociendo a la asociación, si no han hablado hasta ahora es porque o bien antes les daban de comer o bien la muerte de la rata ha sido especialmente chapucera y cruel.
Como observador externo al fenómeno, me ha llamado la atención el que llame la atención la muerte de un animal perteneciente a una especie cuyos componentes son deliberadamente envenenados, apaleados, tiroteados y trampeados, cada día en todo el mundo. Sin consideración alguna a sus sufrimientos a la hora de morir.
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